sábado, enero 31, 2004

¿Cuántos MyDoom habéis recibido?


Yo ya he perdido la cuenta, pero al menos unos diez correos con el virus. Supongo que eso quiere decir que varios de vosotros tenéis vuestros PCs infectados y muy probablemente ni siquiera lo sabéis.
¿Qué diferencia a mi PC del vuestro? Pues a eso os puedo decir que unas cuantas cosas. En primer lugar yo uso una aplicación llamada MailWasher para previsualizar los correos. En palabras sencillas, antes de abrir mi programa de correo, abro el MailWasher y este se descarga los encabezados de los correos residentes en mi servidor. A lo largo del tiempo he ido haciendo la lista de amigos y la LISTA NEGRA. Los correos son clasificados en base a esas listas, y puedo borrar, Rebotar o Aceptar cada correo. Una vez proceso la lista, el programa se encarga de limpiar en el servidor lo indeseable, abrir mi programa de correo, y este solo descargará los correos a los que Yo di el visto bueno.
¿Hay más diferencias con vuestros PCs? Posiblemente. Mi lector de correo no es ni el Outlook Express ni el Outlook. Yo uso el Mozilla Thunderbird. Como la mayor parte de los virus están hechos para atacar vulnerabilidades de Microsoft, escapo limpiamente a todos ellos.
¿Qué más haces para no haber pillado un virus en el PC en los últimos años? NUNCA, NUNCA, NUNCA abro ficheros ejecutables, aunque me los envíe el mismo Dios. Tengo siempre un programa antivirus up-to-date en mi PC. En la actualidad uso el AVP, pero Norton también está muy bien. Y por supuesto, EL FIREWALL. Yo tengo el ZoneAlarm, pero Norton, MacFee y otras compañías tienen alternativas válidas.
Resumiendo, si queréis un PC limpio e impoluto nunca se es suficientemente paranoico.

miércoles, enero 28, 2004

Nieva


Ha llegado. Le ha costado pero al final lo ha conseguido. La nieve ha llegado a los Países Bajos. Uno vive para estos momentos. No os podéis ni imaginar lo bonito que es esto cuando está todo blanco. Ahora mismo mientras escribo la nieve cae reposadamente. Y no veas la nevada que cayó esta mañana. Nevaba sin parar. Lo malo es que como la temperatura es muy alta (2 o 3 grados) no se asienta y desaparece. Pero da igual. Lo bonito es verla caer.
También tiene sus peligros, no os creáis. Suelen poner sal en las calles y en los carriles bici para evitar la formación de hielo, pero a veces se dejan algún rincón atrás y zás, hostia al canto. Esta mañana cuando iba hacia el trabajo, escuchando mi audiolibro (estoy escuchando DUNE de Frank Herbert, probablemente la mejor novela de ciencia ficción de todos los tiempos), veo que la bicicleta que va delante de mí reduce velocidad. En frente tenemos un anciano (viejo vulgaris) que anda en su silla de rueda eléctrica y ha decidido cruzar la calle en cualquier sitio. Su capacidad de decisión fue tan certera que se paró justo en la zona en la que no habían podido echar la sal y una espesa capa de agua nieve campaba a sus anchas. La bici que iba delante de mí comienza a frenar, pero por culpa del aquaplaning se desliza peligrosamente. Yo hago lo propio y también me deslizo hacia el desastre. Pongo los pies en el suelo para hacer el trípode e incrementar la velocidad de frenado. El viejo mira hacia atrás, nos ve venir, y del pánico para la puta moto eléctrica. Yo pensé que nos lo comíamos, porque nos bloqueó el camino, pero al final ambos conseguimos frenar a tiempo y el que iba delante se dio el lujo de decirle un par de cosas al abuelote en su propio idioma. Yo, que aún no me había recuperado del susto y no quería perder el hilo argumental de la historia que iba escuchando decidí no decirle nada al puto gilipollas.

domingo, enero 25, 2004

Robo frustrado


El viernes cuando llegué a la oficina me encontré con que los ordenadores de nuestro laboratorio no estaban funcionando. Pensé que era un problema de red, como siempre, pero tras preguntar a los compañeros me enteré que la noche anterior habían entrado a robar y se habían llevado 13 de nuestros ordenadores.
Cundió la alarma por toda la oficina. Alarma y recochineo porque canta mucho que un complejo de 4 edificios con más de 400 empleados no tenga un misero sistema de alarma y que la compañía de seguridad se de un paseo cada dos horas para ver como está todo.
Hubo tanta suerte que parece que los ladrones una vez habían sacado y apilado los ordenadores al lado de la valla tuvieron que salir por patas (Dios sabe por qué) y allí quedaron los equipos hasta que fueron descubiertos por una ronda de seguridad posterior.
Cuando la policía acabo de tomar huellas nos permitieron recogerlos y devolverlos a los laboratorios. Supongo que la policía holandesa tendrá un montón de mis huellas, porque yo me paso la vida abriendo esos equipos para añadir o quitar hardware.
¿Me pregunto si estarán mañana lunes en el laboratorio o habrán vuelto para acabar su trabajo durante el fin de semana?

jueves, enero 22, 2004

Como el H.U.C. puede matar antes que un CANCER


Esta es la versión resumida de cómo una sucesión de negligencias, desorganización y desidia han conseguido minar la esperanza y quizás, acabarán con la vida de Maria, una mujer trabajadora, de familia humilde ahora convertida en una paciente más que por desidia en Atención Primaria y en el Hospital Universitario de Canarias (H.U.C.) terminará desahuciada y muerta como otros tantos pacientes. Parece que la mala suerte se haya ensañado en Maria.

1.- En Atención Primaria (A.P.) no prestan la atención necesaria a Maria, ni especialista ni pruebas, sólo se le dice que camine y se relaje que todos sus males y dolores son nervios.
2.- Muchos años mas tarde Maria entra en Urgencias del H.U.C. con dolores terribles en el abdomen, espasmos incontenibles y sensación de frío atroz. Se le aplica un enema.
3.- Un mes más tarde re-ingresa en Urgencias con la misma sintomatología. Se decide aplicar un enema aún más grande que el primero. Maria se niega y suplica se le haga una eco.
4.- Al día siguiente Maria es ingresada en la planta 6ª con la sospecha de cáncer de colon avanzado y metástasis hepática. Tras 21 días se confirma el diagnóstico.
5.- A la familia se le comunica que hay una línea de trabajo que puede llevar a Maria a la curación.
6.- Los cirujanos nos informan que tras valorar los escáneres es factible operar a Maria del tumor primario en el colon y las metástasis hepáticas, y tras las operaciones, pasaría a oncología médica. Maria es operada con laparoscopia satisfactoriamente y dada de alta, sin embargo, tiene cita 7 semanas después con oncología y 8 semanas más tarde con cirugía. Queda agosto en medio.
7. - En Oncología no parecen entender que hayan pasado 7 semanas de operada del primario y no se haya ni operado las metástasis ni comenzado la quimioterapia. Inmediatamente la oncóloga pide a cirugía valoración del nuevo scanner. Resultado: el peor. El tumor creció en ese tiempo y no se puede operar.
8. - Inicio de quimioterapia para reducir el tumor. 3 meses y medio de fatigas, dolores, llagas, ...
9. - Desafortunadamente Maria entra en Urgencias debido a fiebre alta. El trato allí fue inhumano. Quien haya entrado en urgencias sabe de lo que hablo. Es ingresada en planta y tratada con antibióticos. Se va de alta y reingresa 2 días después, anémica, inmuno-deprimida…, la quimio la está matando. Faltan pocos días para navidad y se le da el alta ya recuperada y propuesta para operar pues el escáner revela que la quimioterapia ha reducido el tumor y vuelve la esperanza de la curación.
10. – Pero no la operaran. He escuchado razones de todo tipo, que si los quirófanos se cierran en navidad, que si el personal está de vacaciones, que no importan 2 o 3 meses que la “enfermedad” no crece tan rápido, que los quirófanos están colapsados, que esperar tres meses en lo normal, …
12.- He hablado, hablado, y hablado, con los oncólogos, con los cirujanos, con admisión, con preanestesia, con los informadores, con enfermeros, con las secretarias… también he llorado de rabia, de impotencia, perdido el sueño y varios kilos. Pero a pesar de todos los fallos del sistema, de la saturación y de muchos casos de “burn-out”, he encontrado personas que mantienen sensibilidad y humanidad y se han hecho eco de esta situación, y eso me alienta a seguir luchando por Maria. Al final se ha conseguido que la operación ya tenga fecha.
13.- Han pasado 6 semanas. El tumor está sin tratar desde entonces. Pero son las 6 de la mañana y Maria se prepara para la operación. Se ducha con agua fría porque dice que abajo, en la planta de los quirófanos, hace mucho frío y no quiere constiparse. A las 7 y media la bajarán a quirófano como estaba previsto, allí le espera, quizás, la vida unos cuantos años más. Son las 7, 7 y media, las 8 y media. Maria ya ha escuchado varias veces las cintas de relajación que un psicólogo le grabo para soportar la espera y bajar tranquila. Son las 9. Operación cancelada.
14. - Hoy es 22 de enero, son las 5 de la mañana. De nuevo, la fatídica cifra de siete semanas del mismo tumor sin tratar no me deja dormir. Las mismas 7 semanas sobre el mismo tumor que en verano creción y se hizo inoperable. Incluso he oído que tras las quimioterapias a veces ciertos tumores les da por volverse más agresivos aún de lo que eran. Pero en el H.U.C. parece que eso no cuenta. No hay camas de reanimación. Sospecho que para cuando la haya, los cirujanos no operan. Cuando los cirujanos puedan a lo mejor ya no habrá cama. Finalmente cuando operen, abrirán a mi madre la cerrarán como a otros diciendo no se ha podido. El tumor habrá ganado.
15. - Maria, mi madre, sigue esperando desanimada, sostenida por la medicación contra la depresión y la ansiedad. Ayudada por su fe en Dios intenta mantener la voluntad de seguir luchando contra el cáncer sin saber que realmente contra quien lucha es contra un sistema hospitalario defectuoso que dinamita día a día con excusas y con negligencias la alternativa que hasta hoy existe para su curación.
16. – Cada día que pasa el tumor crecerá y con él las esperanzas de vida de mi madre. Sospecho que el tumor no entiende de vacaciones, ni de camas, ni de fiestas de navidad, de política, burocracia,... Sólo invade y se extiende.

Yo soy su hijo. He dejado mi trabajo, mi casa en las palmas, mis amigos y hasta he perdido a mi pareja. Hace nueve meses que empezó esto y he aparcado mi vida por la de ella y he hecho del hospital casi mi segunda residencia. Ya no me importa perder el sueño ni hablar con quién sea. Incluso se me pasa por la cabeza hacer una huelga de hambre o encadenarme en algún sitio en el hospital, con tal de conseguir que la operen antes de que sea demasiado tarde. Estoy hecho a la idea de perder a mi madre por un cáncer, pero no que la mate el H.U.C. A veces pienso que sería mejor, ser una de esas personas mayores que va al hospital y no saben nada y pensar que a su familiar se lo llevó Dios. Ahora siento que voy camino de ser una mas de esas personas que te cuentan una triste e increíble historia de un familiar, un hospital y un trágico final que podía haber sido evitado.

Ya son las 7 de la mañana. Me voy a la ducha que tendré que ir al hospital a ver a mi madre.

miércoles, enero 21, 2004

El horror según ElMundo.es


Que a la prensa en España le gusta manipular lo sabemos todos. Que no respetan a nada ni a nadie, también. Hoy en el álbum de fotos del periódico el mundo hemos tenido un claro ejemplo. Con un pie de foto titulado “El Horror” aparece la infanta Elena y su esposo. ¡Manda güevos! La pobre es fea, hay que reconocerlo, vamos que podría compartir honrosamente con Tizio un espectáculo, pero de ahí a titularlo el Horror va un mundo (y no precisamente un periódico). Una vez se hace clic en la foto se cuenta una historia distinta, hablando de los horrores en los campos de concentración y demás, pero el impacto, la imagen, lo que queda remanente en nuestro cerebro es la infanta Elena y el título EL HORROR. La infanta parece mirar en la foto a un payaso que tiene en la foto inmediatamente anterior y que posee el sugestivo pie de foto: “Cuidado” ¿de quién tiene que tener cuidado? ¿Del cayo malayo que le han puesto al lado? El marido de la susodicha, otro con el que Dios parece haberse ensañado, mira mientras tanto hacia otro lado, pensativo. En fin, por si os lo perdisteis, disfrutad con ese pedazo de imagen del día.

lunes, enero 19, 2004

11 días de lluvia


Parece que estamos bajo una ducha y no hay forma de cerrar el grifo. Llevan 11 días consecutivos lloviendo. En invierno. Esto es simplemente increíble. No sé donde vamos a llegar. Debería hacer sol y mucho mucho frío y lo que tenemos son 9 grados y agua que cae sin parar. Ya me he acostumbrado al ritual por las mañanas y por las tardes. Antes de coger la bicicleta, me pongo la chaqueta, el pantalón chubasquero, el chubasquero sobre la chaqueta (que también soporta el agua), el gorro tipo Kenny McCormick y los guantes y en menos que canta un gallo me he transformado en el CONDÓN andante.
De esta guisa voy al trabajo. Al llegar al parking de bicicletas que gracias a Dios es cubierto, realizo el proceso opuesto. Me quito el chubasquero, me quito el pantalón de chubasquero (una especie de pantalón de plástico), me quito los guantes, el gorro esquimal y ya estoy listo para entrar en el trabajo. Dejo todo sobre la bicicleta para que se seque en las siguientes 8 horas y esté listo para el viaje de vuelta.
Por culpa de las nubes los días son muy oscuros. Por las mañanas no se nota que es de día hasta las 9 o más tarde y por las tardes estamos en penumbra desde las cuatro. Esto es una pesadilla. Ni rastro de nieve, ni rastro de hielo, nada de nada. Sólo agua.

domingo, enero 18, 2004

El cine ha sido actualizado


Hace ya unos días que actualicé las páginas de cine con las películas que he visto desde que estuve en España por Navidad. Podéis encontrarlas en: Cine de Diciembre y en Cine de Enero. Estoy ya trabajando en la nueva versión de este Web, así que tendréis que disculpar la baja frecuencia de actualizaciones.